Sarpullido en personas mayores

Sarpullidos por calor en personas mayores

El sarpullido por calor en personas mayores es una molestia bastante frecuente, pudiendo generar diversas incomodidades o inclusive casos graves, donde se precisará de la atención médica.

De esta manera, en este artículo de Residencia Geriátrica Dr. A. S. se expondrán diversos puntos que ayudarán a prevenir esta molestia en pacientes de edad avanzada: conocer sus causas, los síntomas que generan y los tratamientos más adecuados para prevenir este padecimiento.

Causas del sarpullido por calor en adultos mayores

Conocida por el nombre de miliaria o también como erupciones cutáneas, el sarpullido por calor en las personas mayores se presenta en aquellas zonas con un clima bastante caluroso y cuyas condiciones de humedad son elevadas, con sensaciones incómodas y desagradables para quienes lo padecen.

Los adultos mayores, debido a ciertos problemas, pueden desarrollar la miliaria, o erupciones cutáneas de calor, especialmente en zonas donde existe mucho calor y humedad ambiental.

Una de las causas de esta afección se debe al sudor que no se expulsa de la piel, debido a la obstrucción de los conductos o poros sudoríparos, particularmente de espalda, axilas, escote, brazos, entre otras zonas. 

En ellos la regulación de temperatura corporal es limitada debido a la piel tan frágil que presentan en función de la edad o la reducción de la actividad de la glándula sudorípara.

Asimismo, otras causas que se consideran de riesgo para aumentar la miliaria:

  • Tomar reposos prolongados.
  • Hacer actividad física, especialmente si se trata de ejercicios físicos intensos con problemas en la glándula sudorípara a una edad avanzada.

La consecuencia es que el sudor queda atrapado entre el conducto y la parte baja de la piel, lo que irrita y se manifiesta como protuberancias.

Síntomas del sarpullido por calor en personas mayores

Una de las manifestaciones clásicas del sarpullido por calor son erupciones de color rojo o con forma de bulto, especialmente en pliegues (codos, axilas, ingle y parte trasera de la rodilla) o donde la ropa o el contacto con otros elementos es más prolongado.

Otras formas de manifestación de esta condición:

  • Ampollas de líquido las cuales revientan sin complicaciones.
  • Las ampollas o bultos que no tienen líquido, las cuales se desarrollan en zonas dérmicas más profundas, creando picazón, cosquilleo, entre otro.
  • Inflamación de la piel con secreciones pustulosas (pus).
  • Aunque es menos frecuente, puede afectar la epidermis, y la manifestación externa son lesiones más enrojecidas y de aspecto firme, pues el sudor ha irritado severamente el interior de la piel.

Tratamiento del sarpullido por calor en adultos mayores

El factor más importante a considerar para este padecimiento es “la prevención”, y bajo estas líneas enumeramos algunas de las medidas preventivas que disminuirán el desarrollo de erupciones cutáneas:

  • La vestimenta adecuada. Es recomendable evitar materiales que irriten la piel o aumenten la sensación térmica.
  • La hidratación es fundamental. Beber agua en gran cantidad durante el día, mantiene la hidratación de la piel y permite regular eficientemente la temperatura. También se complementa la hidratación con infusiones de manzanilla o camomila, ingredientes estupendos con múltiplos beneficios. 
  • Ambiente más fresco. Exponerse prolongadamente a ambientes calurosos o húmedos puede favorecer el sarpullido. Es recomendable ambientes con acondicionador de aire o ventiladores que reduzcan el sudor excesivo.
  • El cuidado de la piel. Especialmente para las personas mayores, se hace necesaria la utilización de polvos que eviten la fricción o que absorban la humedad, en particular en aquellas áreas donde se genere o acumule sudor en exceso. El uso de vinagre de manzana (3 o 4 cucharadas) en 1 litro de agua, también se recomienda para prevenir este sarpullido, aplicándose por la mañana o por la noche.
  • Por último, el baño (con agua fría) permite regular eficientemente la temperatura corporal y de la piel, además que ayuda a reducir la acumulación de sudor, empleándose productos que no sean agresivos.
Prurito en ancianos

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